El paro juvenil sube al 16,9% en la UE

Un vistazo a las cifras de paro juvenil que presentan las distintas economías europeas tras el estallido de la pandemia del covid-19. ...

La brusca caída de la producción asociada a la pandemia del covid-19 se ha trasladado de manera desigual al desempleo juvenil de los distintos países miembros de la Unión Europea, evidenciando las grandes diferencias que existen en los sistemas formativos y laborales del Viejo Continente y que son especialmente llamativas en el caso del paro juvenil.

La Comisión Europea cree que el PIB comunitario se reducirá en torno a un 9% durante el curso 2020, un desplome sin precedentes en la historia reciente. Sin embargo, el paro medio registrado en la UE-27 ha subido apenas dos décimas con respecto a las cifras observadas el pasado año. Así, Eurostat ha certificado que junio se cerró con un desempleo del 7,7%, casi a la par con el 7,5% del mismo mes de 2019.

Debajo de esa media afloran tasas de paro cercanas al promedio, pero también algunos países con registros marcadamente superiores o inferiores. Grecia y España destacan para mal, con un desempleo oficial del 18% y el 16%, mientras que República Checa y Polonia apenas tienen al 3% de sus trabajadores en una situación de desocupación. Otros países que se colocan claramente por debajo de la tasa de paro medio de la UE-27 son Holanda o Alemania, con niveles ligeramente superiores al 4%, mientras que por la franja superior preocupan los datos de Italia y Suecia, cuyo paro se sitúa por encima del 9%.

Los jóvenes son, no obstante, el segmento más golpeado por la caída de la actividad, puesto que su tasa de empleo es, en promedio, mucho más baja. Si analizamos los datos de paro juvenil que facilita Eurostat, vemos que este indicador alcanza el 16,9% en la UE-27 y llega al 17,1% en la Eurozona. Por lo tanto, los niveles de desempleo que enfrentan los menores de 25 años duplican las tasas observadas entre el conjunto de la población activa.

El país que peor ha protegido el empleo juvenil tras el estallido de la pandemia es Lituania. Si hace un año tenía al 10,6% de los jóvenes en esta circunstancia, hoy ese porcentaje alcanza el 22,6%. También resulta preocupante el dato de Luxemburgo, donde este indicador ha crecido del 15,5% al 25,9%.

España y Suecia también destacan para mal en este indicador. El país ibérico ha visto cómo la desocupación de los menores de 25 años se dispara del 31,8% al 40,6%. Si su tasa de referencia ya era alarmante en junio del pasado año, el registro de comienzos de este verano es aún peor si cabe. Tampoco el país escandinavo presenta una situación satisfactoria, puesto que durante el último año ha visto cómo el paro juvenil aumenta del 23,6% al 32,3%.

Hay dos países que sí han conseguido reducir el paro juvenil: Bélgica, que lo recorta del 13,6% al 12,6% entre los meses de junio de 2019 y 2020, y Polonia, que lo rebaja del 10,5% al 9,7% durante el mismo periodo. Salvando estos dos países en que se ha observado una mejora a pesar de la pandemia, Alemania figura como la tercera economía con mejor desempeño, ya que sus niveles de paro juvenil suben solamente 0,6 puntos, pasando del 6,5% al 7,1%. Además de Alemania y Polonia, hay otros cuatro países con un paro juvenil inferior al 10%: se trata de República Checa (8,8%), Austria (9,8%), Bulgaria (9,9%) y Malta (9,9%).

El índice de flexibilidad laboral que elabora en Lituania el Free Market Institute puede servir como base para medir el grado de rigidez de los sistemas mercados laborales de Europa y la OCDE. Este ejercicio de análisis contribuye a empujar reformas orientadas a reducir las trabas fiscales, regulatorias y formativas que complican la inserción laboral de los jóvenes, especialmente ahora que la pandemia del covid-19 ha golpeado duramente las economías del Viejo Continente.